En los últimos meses la vida de todos ha dado un cambio enorme. Nos hemos tenido que adaptar a una nueva situación, inesperada y que ha traído consigo una transformación en todo aspecto de la vida.
Todos los sectores económicos, así como las costumbres de cada persona de manera individual y familiar, han dado un giro de 180º que ha obligado a replantearse muchas cosas. Incluso el sector inmobiliario se ha visto alterado debido a la pandemia mundial del Covid-19.
La incertidumbre y el miedo de lo que puede pasar, en especial en el tema económico, provoca que un sector como el inmobiliario que se nutre de ofrecer una solución a las personas que necesitan de una vivienda, entre en una situación especial de inseguridad.
Sector inmobiliario, ¿en crisis por el Covid-19 igual que en 2008?
La crisis económica de hace unos años hizo que pareciera que el sector inmobiliario se tambaleara. Hoy muchas personas piensan que debido a la pandemia mundial del Covid-19, nos encontramos en una situación muy parecida.
Es cierto que la incertidumbre económica puede hacer que haya algún retroceso, pero en el caso de la pandemia la situación es muy diferente a lo que ocurrió años atrás.
A diferencia del 2008, hoy el sistema financiero se encuentra en una mejor posición para poder soportar el envite. También las familias han aprendido y hoy existen más personas ahorradoras que miran muy bien antes de hacer un gasto…¿O quizás no?
Otra cuestión es la de la situación de los bancos, en muchos casos los intereses a pagar han ido bajando y se han colocado una posición muy interesante ahora mismo, además de que la tendencia en las hipotecas sigue al alza, los bancos quieren seguir prestando dinero y eso si es clave en este sector.
Estas razones hacen que, sin poder saber con total exactitud lo que pasará, nos hagan ver con algo de positivismo el futuro del sector inmobiliario frente a esta pandemia.
El futuro del sector inmobiliario por el Covid-19
Es evidente que en el futuro del sector inmobiliario se puede esperar una bajada en los precios tanto de alquileres como en hipotecas, debido a la influencia del Covid-19, por lo menos a corto plazo.
La pandemia nos ha obligado a tener que obedecer nuevas normas para evitar contagios, como el no salir de las provincias donde en la actualidad se está viviendo, lo que trae que menos gente pueda alquilar o comprar una segunda vivienda en una zona de playa, por poner un ejemplo.
Otra de los efectos de la pandemia es que todo el mundo está viviendo en una nueva época de incertidumbre laboral. Hay personas que se encuentran en ERTE y que apenas les llega lo que reciben para pasar el mes.
Muchos caseros han visto como sus inquilinos, tras perder sus trabajos, han tenido que dejar de pagar el alquiler o han debido bajarlos para que ellos puedan hacerles frente.
Esta claro que todas estas situaciones hacen que el sector inmobiliario deba reinventarse para atraer a los posibles compradores o inquilinos del futuro. Por eso, es innegable que los precios tendrán que ajustarse para adecuarse a los bolsillos de los compradores locales en el corto plazo ya que parece que la inversión internacional, tardará en despegar y esto es clave en las grandes ciudades como Barcelona, Madrid o Valencia.
Un favtor común en propietarios, inquilinos y posibles compradores es el MIEDO.El temor a acabar endeudados hace que haya quien se piense mucho lo de una nueva compra y el mismo temor a que tener impagos hace que algunos propietarios dejen de alquilar.
En esto todos debemos poner nuestro granito de arena, inquilinos, compradores, caseros, agencias inmobiliarias y Personal Shopper Inmobiliarios (o asesores del comprador) para sacar adelante el sector en esta “nueva normalidad”
Algunos cambios que podrían ser muy significativos
Esta pandemia nos obliga a cambiar nuestro modo de ver y hacer las cosas. Si antes la tecnología nos inundaba, ahora resulta mucho más importante y clave a la hora de comprar , vender o alquilar inmuebles. Las visitas virtuales, los planos en 3D o los renders hiperrealistas ocuparán un puesto más importante en el futuro.
El sector inmobiliario debe adaptarse a esta nueva normalidad en la que el distanciamiento social se ha convertido en parte de nosotros. Internet se convertirá en el primer modo de llegar hasta los compradores o personas que quieran alquilar un piso.
Es importante volver a conocer a los consumidores, las tendencias en la búsqueda de casas han cambiado. El hecho de que se pueda volver a tener que pasar épocas en confinamiento, hace que los clientes busquen casas más amplias y con mucha luz natural, incluso con jardines donde tomar el aire y se hacen indispensables las Terrazas. Figuras como las del Personal Shopper Inmobiliario adquieren especial relevancia aquí, tenderemos a alquilar y comprar de forma mucho más profesional, ayudados por un asesor que nos guíe en el proceso y facilite esta compra o alquiler.
Los precios es indudable que también se tendrán que amoldar a la nueva realidad que nos rodea, aunque puede ser modificaciones a corto plazo, no veo una tendencia clara o larga en la bajada con la situación actual. Las personas se piensan mucho más las transacciones, buscan más ofertas y el miedo a que en algún momento puedan perder el trabajo en estos momentos hace que lo más importante para ellos sea un precio real a la baja.
El modelo de alquiler también sufrirá cambios, muchos pequeños y grandes inversores disponen de casas de playa o en las ciudades para alquilar según el modelo Airbnb. Sin embargo esta nueva situación debida a la pandemia, sin turismo prácticamente hace que pueda buscarse mucha más seguridad mediante el alquiler de largo plazo y esto haga aumentar la oferta, aunque esto quizás lo dejamos ya para otro post….